Tú eres el protagonista
¡Cómo mola bucear por papeles y cuadernos garabateados de antaño!, y reencontrarte con poemas que uno no recordaba. Como este de 1999, con quince años.
Vaga cada mañana por el mismo camino,
se dirige al mismo lugar, ya determinado,
a paso rápido aleja las dudas a un lado,
cree saberlo todo, mas ¿qué le traera el destino?